martes, agosto 08, 2006

Llanto Celeste


Llanto celeste

Cae la tarde
Se empaña la claridad de un día.
Llueve en la noche.
Duelen las gotas al recorrer mi piel.
Llueve de día.

En un recorrido solitario,
por una calle extraña perseguida por las sombras de un recuerdo de felicidad.

Lágrimas desde el cielo.
Mojan mi pelo que una vez en sus manos floreció.

Suspiros encontrados en un universo inhóspito.
Buscando el calor de cien años entre las gotas tristes que llora el cosmos.
Tristeza tan interna como la sangría de una pérdida mortal.

Llueve.

El frío de las gotas se mete lánguidamente en cada hueso de mi frágil forma.
Aguacero de promesas rotas.

Tristeza controlada por agujas heladas que invaden cada pensar… cada segundo… mi hogar.
Tormenta de pena, que es tan profunda como el sentimiento de amar.

Historias mojadas…encontradas…tergiversadas… ¿cuál es mi mentira… cuál es mi verdad?
Huracán de doce meses. Terremotos, temblores corporales, incapacidad de parar.
Granizo continuo ¿cuanto más?

Viento tumultuoso que descubre la pasión escondida.

Dos moléculas idénticas de hidrógeno y una de oxígeno.
Llueve.

Llueve.

Duele cuando llueve.

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