Durmiendo...
Se entrelazan los finales y laten los corazones al unísono.
Me arropas con la calidez de piel, sin ojos y sin miedo.
Besándonos en sueños de futuro en las noches del presente.
Crece un torrente que empapa la llegada de luz.
Existen sólo dos en la infinidad universal.
Queriendo estar por primera vez.
Despertar a los ojos sin lágrimas.
1 comentario:
No, no.
No más besos del futuro.
Y qué pasaría si te lo negaran?
Te quedarías si presente.
Que hrato imaginar el abrazo cálido, cálido de piel.
Hay que encontrar ojos sin lágrimas.
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