sábado, octubre 21, 2006

Libremente aprisionada


La maldita sonrisa burlona se dibuja en los ojos viles que murmuran,
como las venas abiertas del viento indomable,
envolviendo los riscos de mi corazón.

Allí, secretamente, se mecen los vestigios que causan mis lágrimas inhumadas
en la azul sábana de palabras olvidadas,
mientras mis pensamientos vagan como cristalinos surcos de inocencia
y despiertan en la noche al nuevo sol de mayo.

¿Cuánta prisión esconde al alma dormida
en increíbles pasadizos oscuros que resultan huecos, vacíos, llenos de eco
al estar llenos de dolor?

Y sin embargo,
el lazo que aisla las almas sedientas
se desliza en mis dedos como seda de besos de amor.

Las tres llaves se mueven, se retuercen,
y dejan pasar este corazón que se alza,
inconmensurable,
al altar del esplendor libre,
del grito libre,
de la risa libre ....

Finalmente despertó el alma...

Acercó nuevamente tus labios a los míos,
Y voló junto a mí en mil pesadillas de siestas vividas.
Desatiende las llamadas que te envían a ese lugar
donde el mundo no tiene llaves para abrir el misterio,
como sólo lo haces tú.

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